Un tradicional de la cocina de aprovechamiento. Otra buena iniciativa para seguir llevando a la práctica y siempre y en todo momento con recetas distintas. Mientras dominas el arte croquetil, te propongo ciertas recetas diferentes para probar en casa. Cuando esté a tu gusto y con todos los elementos agregados, vuelca la preparación en una fuente, espera a que atempere, cúbrela con un papel film y colócala en la nevera hasta el pasado día.
La salsa bechamel se considera como entre las tres salsas mamás o universales, de las que se derivan todas las otras, junto a la salsa de tomate y la mahonesa. La receta clásico utiliza como ingredientes primordiales harina, mantequilla y leche, aliñados con una pizca de sal y nuez moscada. En esta ocasión te proponemos una variante desarrollada con leche evaporada, más espesa que la leche entera por contener menos agua, por lo que resulta una alternativa estupenda para una salsa bechamel para croquetas. Una vez esté listo el roux blanco, solo es necesario ir incorporando la leche evaporada de a poco. ¿De qué forma conseguimos una salsa bechamel sin grumos? El truco está en no dejar de eliminar la mezcla, hasta que la textura quede despacio y uniforme.
Bechamel Rápida, Salsa Para Días Con Prisas
En el momento de condimentar nuestra bechamel, vamos a deber hacerlo inmediatamente antes de retirar la cazuela del fuego. Por lo tanto, si sólo vais a integrar sal es el instante (con la nuez moscada y/o la pimienta lo mismo). A continuación, añadimos la leche y batimos la masa con unsa varillas, hasta que tengamos todos y cada uno de los componentes integrados en una pasta uniforme. Si por un casual te quedan grumos puedes usar la batidora de mano de forma cuidadosa de que no te raye la cazuela o sartén. Añadimos el harina, siempre la misma proporción de harina que mantequilla. Removemos de forma rápida hasta espese y se incluyan los ingredientes quedando una suerte de masa con textura densa.
Por ello, deberemos remover a lo largo de unos 2-3 minutos sin parar hasta el momento en que veamos que la harina coge un color tostado tirando a dorado. Aparte de estos ingredientes, hay gente que opta por incorporarle nuez moscada, pimienta y sal, si bien realmente con los condimentos principales son los precedentes. Estos que terminamos de refererir, sirven para sazonar la bechamel, pero verdaderamente podríamos prescindir de la nuez moscada y la pimienta. Cuando la masa empieza a hervir y ya notamos que está espesando, añadiremos aquellos ingredientes que van a dar sabor a nuestra bechamel para hacer croquetas. Comenzamos poniendo la mantequilla y la pastilla de caldo de carne en una sartén a fin de que se derritan.
Precisamente la bechamel es la salsa que liga el ingrediente del que hagamos las croquetas y nos permite proporcionarles forma. Para las croquetas, es fundamental que la bechamel quede sólida. Si ya está a puntito de hervir y aún no espesa lo suficiente, apártala del fuego, sigue removiendo y luego colócala de nuevo en fuego bajo para que no pierda cuerpo, pero se evapore el líquido. Deseamos que tenga personalidad, conque también usaremos cebollas que pecharemos con la mantequilla hasta que queden transparentes y después le incorporaremos la harina tamizada, de a poco, para hacer el roux.
Información Sobre Nutrición Adicional Por Ración:
Vas a ver que según vas dando vueltas a la pala, se marchan quedando formas en la superficie de la masa y que cuando arrastras la masa desde un lateral hasta el centro, le cuesta llenarse al espacio. Es decir, añades algo de leche y revuelves, en el momento en que se ha absorbido, añades otro poco de leche. De esta forma hasta que finalices de añadir toda la leche. Y siempre y en todo momento revolviendo sin parar, con movimientos circulares.
Una vez lo hayan hecho, agregamos la harina y la trabajamos a lo largo de unos minutos hasta el momento en que esté tostada y sueltecita, con un aspecto similar al de la foto. Si haces lo que te digo sin salirte del guión, te vas a dar cuenta de que realizar croquetas es muy fácil, solo tienes que pesar los elementos y cocinar tal y como te digo. Con esta formulación de ingredientes, nos van a salir unas croquetas fáciles de trabajar. Cuando ahora tienes práctica hay que mudarla, las vamos a hacer mucho más cremosas y va a aumentar el grado de complicación si bien ahora te digo que merece la pena. En el momento en que la harina y la mantequilla están bien mezcladas, se añade la leche.
Raciones Recomendadas Para Una Receta Salada
La leche tiene que estar tibia y añadirla de a poco. Nos asistimos con una batidora manual, de este modo eludimos los grumos. Consejos para llevar a cabo la salsa bechamel para croquetas. En estos años he escrito recetas y libros, grabado vídeos, he dado cursos presenciales y clases en academias de hostelería. Y cocinar para mi familia y amigos todavía es mi gran pasión. En esta web deseo compartir contigo mi experiencia, a fin de que gozes de la cocina tanto como yo y todos tus platos salgan de rechupete.
Puedes emplear jamón, pollo, pescado, verdura.. Cuando esta templada la materia grasa, añadimos la harina y mezclamos hasta forma un roux o pasta. La bechamel para croquetas se hace poniendo la misma cantidad de harina que de materia grasa. Pese a todo, si bien hayas seguido los pasos de forma cuidadosa, cada fuego, cada sartén y cada leche es diferente. ¿qué puedes llevar a cabo si te salen grumos en la bechamel? En ese caso, ya te contamos aquí como solucionar este problema para quitar los grumos sin esfuerzo.
Bechamel Para Croquetas Receta Fácil
Una vez llevada a cabo la masa de croquetas, la dejamos enfriar y la guardamos en el frigorífico. Las croquetas se hacen mejor si dejamos que la masa endurezca de un día para otro. Cuando está caliente añadimos la cebolla muy picadita y removemos hasta el momento en que está transparente.
Es el momento de animar con sal, pimienta y nuez moscada. Eso sí, recuerda que si haces croquetas de jamón ibérico o entonces le vas a integrar algún queso de gusto potente, es mejor no pasarse con la sal. En cualquier caso, siempre y en todo momento pueden volver a rectificar el condimento más adelante. Mientras tanto, calienta la cucharada de aceite y la mantequilla en un cazo a fuego medio y, cuando la mantequilla se derrita, añade la cebolla muy picada.
Ánimo, ahora casi poseemos lista nuestra bechamel. Picamos la cebolla bien fina, a fin de que se lleve a cabo de manera rápida, y la agregamos a la mantequilla a fin de que se poche, sin que coja color. Menudo resumen te acabamos de hacer para enseñarte a realizar una aceptable bechamel, pero en este momento vamos a verlo en detalle puesto que es importante que prestes atención a todos y cada uno de los pasos. Te informamos que los comentarios de cocina-familiar.com están sujetos a moderación por parte de nuestro aparato.
El siguiente paso es añadir la harina a la mezcla previo, y removerlo hasta que esté bien dentro. No hay que dejarlo cocer mucho, pues no tenemos ganas que se queme la harina, pero si se tiene que hacer un poco a fin de que elimine ese sabor a crudo. Una vez que la cebolla esté tierna, añadimos el ingrediente que deseamos para darle gusto a las croquetas. Puede ser el clásico jamón, bacalao, gambas, queso azul, lo que deseéis.
Por servirnos de un ejemplo, estas croquetas líquidas son una explosión de gusto y texturas en la boca. Luego le agregas la leche mientras que revuelves a fin de que se incorpore a la preparación sin problemas y vaya formando la bechamel. Debes meditar que necesitas que la bechamel debe ser mucho más sólida que la que precisas para una salsa. Así que las proporciones de harina serán mayores. Y lo ponemos a cocer de forma lenta a lo largo de unos minutos.