El tiempo de cocción es dependiente de los gustos de cada uno, para un kilo deberíamos supervisar la cocción a los 40 minutos. Introducimos un cuchillo y si sale jugo colorado está todavía crudo, si es cobrizo va a estar próximo y si está seco, se nos pasó. La mejor forma de controlar el punto de cocción es usando de un termómetro con sonda. Si queréis obtener una carne con un interior muy rosado, os aconsejo que la retiréis del horno cuando el interior de la pieza registre una temperatura de 55ºC.
Agrega sal si es requisito y ya estará listo tu lomo de cerdo al horno. Acompáñalo con patatas al horno, puré de patatas, arroz o una ensalada. El lomo de cerdo es la parte que está bajo las costillas y cerca del espinazo del animal. En un bol pequeño, mezclar el aceite de oliva, hojas de romero, la mostaza, el ajo, la sal y pimienta negra.
De Qué Forma Realizar Lomo De Cerdo Relleno
Ante todo al lomo de cerdo relleno al horno le sienta de maravilla una salsa. Lo normal es que sea la que hemos preparado con sus jugos, pero podéis utilizar cualquier otra. Y si lo servís con una guarnición de verduras a la plancha vais a tener un plato redondo. Bridamos con hilo de bramante, esto es, lo atamos a lo largo y a lo ancho a fin de que no se abra durante la cocción en el horno ni se salga el relleno.
Recuerda añadirle a la carne algo de vino o ciertas verduras que lo acompañen. En el momento en que esta alcance los 60-62ºC ya está ahora lista. A lo largo del horneado, sacamos la fuente del horno cada 15 ó 20 minutos, le ofrecemos la vuelta a nuestra parte de lomo y la regamos con el caldo de la fuente. Pasamos el resto de las verduras a una olla, añadimos las patatas chascadas o cortadas en trozos y los guisantes, cubrimos con agua y llevamos a ebullición. Mezclamos los 200 ml de aceite de oliva virgen plus con 1 cucharada de pimentón dulce, 1 cucharada de romero seco y 1 cucharada de orégano. Pelamos las manzanas, retiramos las semillas y cortamos la carne en pequeños dados.
En un bol mezclamos las hierbas aromatizadas y tres dientes de ajo bien picados. Utilizando una brocha de silicona o similar cubrimos con la mezcla toda la superficie del lomo. El truco consiste en hacer un marinado y dejarlo reposar toda la noche, además vamos a explicar de qué forma hallar que la parte interior de la carne también esté muy sabrosa. Cubrir una bandeja para hornear con papel de aluminio y rociarla con aceite en aerosol antiadherente.
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El día de hoy os traigo una receta de lomo de cerdo al horno, un plato muy sencillo de elaborar con el que se obtiene una carne sumamente exquisita y tierna. Jugando con las temperaturas, tanto la de horneado, como la temperatura interna que registra la parte, tenemos la posibilidad de conseguir diferentes desenlaces. Le añadimos medio vaso de vino blanco y un chorro de aceite de oliva virgen plus.
Antes de poner la pieza de carne, el horno debe estar calentado anteriormente. Algo primordial para muchas recetas, pero de manera especial para esta. Personalmente me chifla añadir a la mezcla alguno de los ingredientes dulces nombrados, como la miel, ya que aportan un contraste de sabor exquisito. La parte que hemos horneado es de 1 kilo y medio, con lo que serían 75 minutos en suma de horneado. Si la pieza es mucho más grande, calculad un poco más de tiempo.
Para ser útil dejamos que el lomo se enfríe levemente antes de empezar a cortarlo. Podemos contemplar las lonchas con su jugo para que estén todavía más jugosas. Tapamos la fuente con film transparente y la metemos en el frigorífico a lo largo de toda la noche. Le ofrecemos la vuelta a primera hora de la mañana para que la marinada impregne totalmente el lomo. Media hora antes de meter el lomo en el horno lo sacamos de la nevera a fin de que se temple.
Recetas De Rechupete
Pero eso sí, cerciórate bien pues cada horno varía. Una vez fuera del horno, hay que dejarlo templar un tanto y retirar el hilo. Entre las claves para que este lomo quede muy jugoso es hornearlo a una temperatura despacio. No os sugiero que, para ganar tiempo, aumentéis la temperatura, puesto que el resultado va a ser una carne más seca. Llevamos la fuente al horno y ponemos en el horno, a 170ºC, a lo largo de, aproximadamente, 75 minutos. Si tenéis un termómetro con sonda, lo ideal es que controléis la temperatura interna de la carne.
Ubicamos la carne en una fuente de horno, añadimos el vino y el resto de ramas de romero. Salpimentamos de nuevo y cubrimos con la mantequilla, cortada en dados o a pegotes. Ingresamos la fuente en el horno, precalentado a 180°C con calor arriba y abajo, y asamos durante 45 minutos. Retiramos la fuente del horno y quitamos el hilo de bramante. El lomo de cerdo relleno al horno, puede ser una de esas recetas mucho más costosas, pero desde luego, no posee ninguna complicación. Además, siempre y en todo momento es una opción perfecta para una cena en familia, donde deseas asombrar con un plato rico y muy original.
Siguiendo con la carne, le tiraremos un poco de sal y pimienta. Luego, serán las tiras de bacon, el jamón y el queso los siguientes en cubrir todo el lomo. En primer lugar, nos marchamos a encargar de darle sabor a la carne. Para esto, le añadiremos la sal, tal como el orégano y la pimienta, sin olvidarnos del aceite. Lo mejor es que la cebolla vaya en aros, también el tomate en rodajas, al tiempo que el pimiento es mejor es tiras.
Enjuagar el solomillo de cerdo con agua fría y recortar cualquier exceso de grasa o de la membrana de la carne. Lo ponemos en una fuente para horno sutilmente aceitada y alrededor, repartimos las patatas baby peladas y las cebolletas. Damos la vuelta a la parte de carne y regamos con un vaso de caldo y con el vino blanco. Bajamos la temperatura del horno a 180 grados y continuamos la cocción unos 45 minutos más, hasta que la carne esté tierna. Mientras que, recuperamos en un cazo los jugos del asado y, si es necesario, agregamos un poco más de caldo de carne.
Puedes ir comprobándolo y cuando ya esté prácticamente lista, retirarás el papel y vas a dejar unos minutos mucho más que finalize su cocción. Sencillamente se trata de dorarla en una sartén. Así, los jugos de la carne van a quedar donde tienen que estar, dentro suyo.